Moisés Davia Soriano nació en Chinchilla de Montearagón (Albacete) el 16 de febrero de 1922. Comenzó sus estudios con el maestro Rafael Soria, director por aquel momento de la Banda de Chinchilla, incorporándose más tarde a esta Banda de Música con el saxofón alto y desempeñando el papel de solista con tan sólo doce años de edad.
En 1940 obtuvo el número uno en las oposiciones para músico en la banda del ejército del aire en Madrid como saxofón contralto, lo que le permitió estudiar toda la carrera en el Real Conservatorio Superior de Madrid.
Allí se formó en solfeo, piano, armonía, historia, estética, folklore composición y transposición, obteniendo diploma de primera clase en solfeo, armonía y composición. Perfeccionó sus estudios de composición con Jesús Guridi, Victorino Echevarría, Octavio Forns, Julio Gómez, Martín Gil, Conrado del Campo y Ricardo Dorado.
Estudió dirección de orquesta con Volker Wangenheim (director de la Orquesta Mozart de Berlín) y Herman Scherchen. También recibió clases de dirección de orquesta de D. Modesto Rebollo, entonces director titular de la Banda de Aviación.
Por estas fechas el joven Davia ya se iniciaba en la composición con sus primeras obras, los pasodobles “Mi Gitana Chula” y “Sangre Española”.
En 1947 Moisés Davia se licenció en el ejército y se trasladó a Orense donde le ofrecieron la dirección de una banda de música formada por Alongos y Untes, dos aldeas de la provincia.
La banda estaba formada por unos cincuenta músicos, la mayoría de ellos profesionales procedentes de circos nacionales e internacionales. La dirección de esta banda fue su primer trabajo como director.
Ese mismo año le ofrecieron la dirección de la Banda Municipal de Monterroso, en Lugo, plaza que pasó a ocupar. En tan solo ocho meses, Moisés Davia organizó una agrupación que fue la sorpresa de un certamen de Bandas organizado en Lugo, alcanzando un galardón y un notable triunfo popular.
En 1948 se presentó a las oposiciones del Cuerpo Nacional de Directores de Banda de Música Civiles de segunda categoría, donde obtuvo el número uno entre noventa y dos aspirantes de toda España, convirtiéndose en el director más joven que obtenía plaza en estas oposiciones.
En enero de 1949 mediante concurso de méritos tomó posesión como director de la Banda de Música de Casas Ibáñez (Albacete), eligiendo esta localidad por estar próxima a su pueblo. Fue durante esta etapa cuando compuso el “Himno a Chinchilla“, su localidad natal, el cual fue estrenado con la Banda de Casas Ibáñez en 1949.
Durante estos años en Casas Ibáñez estuvo preparándose para las oposiciones al Cuerpo Nacional de Directores de Banda de Música Civiles de primera categoría, las cuales aprobó en 1953 obteniendo el tercer puesto.
Pasacalles de la Unión Musical Ibañesa por la plaza del Altozano durante la Feria de Albacete, Moisés Davia, 1951
En enero de 1954 se trasladó a Santiago de Compostela, donde tomó posesión de su nueva plaza como director de la banda de esta ciudad. En esta etapa dirigió también la Coral Compostelana e instrumentó el “Himno del Apóstol” para Banda. Ejerció de crítico musical en los diarios La Noche y El Correo Gallego. Un año más tarde, mediante concurso de méritos le ofrecieron la dirección de la Banda de Jerez de la frontera, propuesta que aceptó principalmente a las mejores condiciones que le ofrecían en Jerez.
En enero de 1955 Moisés Davia tomó posesión como Director de la Banda Municipal de Jerez de la Frontera (Cádiz), donde en tan solo unos meses formó un coro presentándolo en la Iglesia de San Miguel con el Miserere de Eslava. Posteriormente y debido a la gran afluencia de público, se repuso el mismo concierto en el Teatro Villamarta de Jerez.
Más tarde y debido al éxito que estaba teniendo la Banda, el maestro Davia fundó la Orquesta Sinfónica de Jerez de la Frontera, la cual en su presentación en el Teatro Villamarta causó una gran expectación al comprobar el público que todos los músicos eran del mismo Jerez. El éxito de la Orquesta Sinfónica fue rotundo, y en poco tiempo fundó también la Escuela de Municipal de Música de Jerez de la Frontera, que años más tarde se convertiría en Conservatorio, consiguiendo subvenciones para la orquesta y el coro.
Por su labor musical Moisés Davia Soriano fue nombrado Académico de Número de la Academia Jerezana de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras. Poco más tarde también fue nombrado Caballero de la Orden del Tío Pepe de Oro, medalla que le fue impuesta el 9 de junio de 1959. También en esta etapa ejerció de crítico musical en los diarios Ayer y La voz del Sur de Jerez.
Durante su estancia como Director en Jerez, el maestro Davia compuso numerosas obras como el “Himno a la Vendimia de Jerez”, “Himno de la Orquesta y Coro de Jerez”, “Uvas de Jerez”, “Caballero Andaluz”, la marcha de Semana Santa “Coronación de Espinas” o “Las Dulces Horas” entre otras. Todas estas obras fueron estrenadas e interpretadas por la Orquesta Sinfónica y el Orfeón de Jerez.
Tras siete años de intensa actividad en Jerez de la Frontera, en 1962 Moisés Davia abandonaba Jerez tras ganar la plaza de director de la Banda Municipal de Alicante, siendo su despedida un auténtico acontecimiento que llenó de amigos y conocidos el andén de la Estación Jerezana de Ferrocarriles.
En enero de 1962 Moisés Davia llegó a Alicante para ocupar la plaza de director de la Banda Municipal. Con la experiencia adquirida en Jerez, pidió la colaboración de los músicos de cuerda de Alicante y provincia y en poco tiempo presentó a las autoridades una Orquesta Filarmónica en los Salones del Ayuntamiento de Alicante.
Pese a la buena acogida de la orquesta por parte del público, no se llegó a apoyar del todo a la Orquesta y sólo se mantuvo durante cuatro años con la escasa ayuda municipal y sobre todo por el amor al arte de sus componentes.
Durante esta etapa también dirigió y condujo a su máximo apogeo a la Coral Crevillentina (Crevillente, Alicante). Con esta coral realizó giras de conciertos por toda España e incluso algunos por el extranjero, obteniendo numerosos premios en certámenes de los que destaca el primer premio en el II Certamen Nacional de Agrupaciones de Corales celebrado en Toledo en 1976.
Además el maestro Moisés Davia obtuvo el Premio Especial José de Sanmillán a la mejor dirección de masas de corales de España. Con la Coral Crevillentina organizó durante muchos años representaciones de ópera en Elda (Alicante), en las que participaron figuras tan relevantes como Plácido Domingo, Monserrat Caballé o Pedro Lavirgen.
En 1969 grabó el primer LP de la Banda Municipal de Alicante con la Coral Crevillentina, titulado Alicante en Fiestas, que años más tarde en 1997 fue reeditado en CD. Este album, junto al volumen II del mismo grabado en 1974, sigue siendo un referente de la música alicantina. Durante la década de los 70 también grabó varios discos más fruto de la colaboración entre la Banda de Alicante y la Coral Crevillentina.
Colaboró como crítico musical en el diario Información de Alicante y escribió artículos para diversas revistas como Hogueras de San Juan y Pueblos Alicantinos, así como para la revista Música y Pueblo, de la Federación Valenciana de Sociedades Musicales.
Fue también asesor musical de la Diputación de Alicante para los concursos de bandas provinciales y regionales. Como miembro de honor del Instituto de Estudios Alicantinos Juan Gil Albert desarrolló una importante labor en la difusión social de la música, convivencia de jóvenes músicos y concursos de composición.
Durante su estancia en Alicante compuso numerosas obras para las Hogueras como “Boda Alicantina”, “Hoguera de Calvo Sotelo”, el arreglo de la canción popular “Serra de Mariola”, y obras como “Palmera de Verde Palma”, “Crepúsculo”, la plegaria “Santa Faz” o el villancico “El Niño Pobre”, todas estas últimas estrenadas e interpretadas durante muchos años por la Banda Municipal de Alicante y la Coral Crevillentina. También destacan los himnos compuestos por Moisés Davia, como el “Himno a Denia”, “Himno de la Orden de la Dama de Elche” o el “Himno a Santa Pola”.
En 1979 quedó vacante la plaza de Director de la Banda Municipal de Madrid. Aunque Moisés Davia llevaba ya 18 años afincado en Alicante y gozaba de gran estabilidad y aceptación por parte del público, alentado por el gran reto que podría suponer para su carrera profesional decidió presentarse a la convocatoria para esta vacante en Madrid.
Cuando el jurado de la convocatoria para la plaza de director de la banda vio el historial como director de Moisés Davia, fue nombrado por unanimidad Director de la Banda Municipal de Madrid.
En 1979 fue presentado como nuevo director en un concierto en el Centro Cultural de la Villa, al cual acudieron numerosos amigos y aficionados, así como vecinos de Casas Ibáñez y otros lugares donde el maestro Davia ejerció de director.
Durante su etapa como director, Moisés Davia dignificó a la banda y propuso a las autoridades que fuera reconocida como Banda Sinfónica Municipal, hecho que fue oficializado en marzo de 1984 coincidiendo con el 75 aniversario de la Banda. También ejerció de articulista en el diario ABC y fue corresponsal y admirado colaborador de la revista Ritmo.
Hizo colaboraciones en el Boletín del Colegio Oficial de Directores de Bandas Civiles, del cual llegó a ser presidente en 1984. En este periodo compuso la obra “Diálogo de Saxofones” así como otras obras para cámara y orquesta.
Con motivo del 75 Aniversario de la fundación de la Banda creada por el maestro Villa, en 1984 se celebraron dos conciertos extraordinarios para celebrar el aniversario, uno en el Teatro Real al que asistieron numerosas personalidades, y posteriormente otro en el Templete del Retiro abierto a todo el público y admiradores de la Banda.
Ese mismo año en otoño se realizó un tercer concierto conmemorativo en el que el Maestro Davia dirigió a la Banda interpretando algunas de las mismas obtas que el Maestro Villa había programado en el concierto inaugural en 1909.
La etapa de Madrid supuso para Moisés Davia la culminación de su carrera como Director durante esos seis años de intenso trabajo y actividad musical. En 1985 decidió retirarse de la profesión activa, jubilándose con 63 años tras haber dedicado casi 40 como Director. Como cierre de su trayectoria se celebró en el Teatro Español un concierto de despedida, para el cual compuso el maestro Davia la obra para coro y orquesta “Canto a Madrid”.
Tras la jubilación, en 1985 Moisés Davia regresó a Alicante donde se había asentado parte de su familia 23 años atrás.
Durante estos años siguió realizando algunas composiciones y actuando como director invitado en varias ocasiones. En 1986 estrenó el pasodoble “Maribel Atiénzar” con la Banda Sinfónica Municipal de Albacete. En 1989 compuso la marcha para la Semana Santa de Jerez “Paz y Aflicción”, estrenada en Jerez ese mismo año, 31 años después del estreno de “Coronación de Espinas”.
En 1993 dirigió a la Banda Sinfónica Municipal de Alicante en la presentación del “Himno a la Hoguera de Maissonave”, acto en el que también interpretó junto a la Banda algunas de sus obras más conocidas en Alicante.
En 1994, con motivo del 85 aniversario de la Banda Municipal de Madrid, fue invitado por el Ayuntamiento para el concierto extraordinario que dirigía Enrique García Asensio en el Centro Cultural el día 14 de noviembre.
Moisés Davia viajó a Madrid con el objetivo de asistir a este concierto, pero fallecía repentinamente la noche anterior, el 13 de noviembre de 1994. Durante el concierto de aniversario se guardó un minuto de silencio en memoria del Maestro Davia.
Tras su fallecimiento, D. Moisés ha recibido numerosos homenajes en los distintos sitios donde ejerció su labor de director. En 1997, la Banda Sinfónica Municipal celebró un concierto homenaje en el Parque del Retiro de Madrid, interpretando la 1º parte del concierto obras de M.Davia.
Posteriormente se le han dedicado calles en Alicante y Chinchilla, así como plazas en Casas Ibáñez y la más reciente en Santa Pola. También se le ha rendido homenaje durante los conciertos conmemorativos de los 100 años de la Banda Sinfónica Municipal de Madrid (2009) y de la Banda Sinfónica Municipal de Alicante (2013).
En 2019, con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento, también se han celebrado conciertos homenaje en Chinchilla y Albacete.
En 1940 obtuvo el número uno en las oposiciones para músico en la banda del ejército del aire en Madrid como saxofón contralto, lo que le permitió estudiar toda la carrera en el Real Conservatorio Superior de Madrid.
Allí se formó en solfeo, piano, armonía, historia, estética, folklore composición y transposición, obteniendo diploma de primera clase en solfeo, armonía y composición. Perfeccionó sus estudios de composición con Jesús Guridi, Victorino Echevarría, Octavio Forns, Julio Gómez, Martín Gil, Conrado del Campo y Ricardo Dorado.
Estudió dirección de orquesta con Volker Wangenheim (director de la Orquesta Mozart de Berlín) y Herman Scherchen. También recibió clases de dirección de orquesta de D. Modesto Rebollo, entonces director titular de la Banda de Aviación.
Por estas fechas el joven Davia ya se iniciaba en la composición con sus primeras obras, los pasodobles “Mi Gitana Chula” y “Sangre Española”.
En 1947 Moisés Davia se licenció en el ejército y se trasladó a Orense donde le ofrecieron la dirección de una banda de música formada por Alongos y Untes, dos aldeas de la provincia.
La banda estaba formada por unos cincuenta músicos, la mayoría de ellos profesionales procedentes de circos nacionales e internacionales. La dirección de esta banda fue su primer trabajo como director.
Ese mismo año le ofrecieron la dirección de la Banda Municipal de Monterroso, en Lugo, plaza que pasó a ocupar. En tan solo ocho meses, Moisés Davia organizó una agrupación que fue la sorpresa de un certamen de Bandas organizado en Lugo, alcanzando un galardón y un notable triunfo popular.
En 1948 se presentó a las oposiciones del Cuerpo Nacional de Directores de Banda de Música Civiles de segunda categoría, donde obtuvo el número uno entre noventa y dos aspirantes de toda España, convirtiéndose en el director más joven que obtenía plaza en estas oposiciones.
En enero de 1949 mediante concurso de méritos tomó posesión como director de la Banda de Música de Casas Ibáñez (Albacete), eligiendo esta localidad por estar próxima a su pueblo. Fue durante esta etapa cuando compuso el “Himno a Chinchilla“, su localidad natal, el cual fue estrenado con la Banda de Casas Ibáñez en 1949.
Durante estos años en Casas Ibáñez estuvo preparándose para las oposiciones al Cuerpo Nacional de Directores de Banda de Música Civiles de primera categoría, las cuales aprobó en 1953 obteniendo el tercer puesto.
Pasacalles de la Unión Musical Ibañesa por la plaza del Altozano durante la Feria de Albacete, Moisés Davia, 1951
En enero de 1954 se trasladó a Santiago de Compostela, donde tomó posesión de su nueva plaza como director de la banda de esta ciudad. En esta etapa dirigió también la Coral Compostelana e instrumentó el “Himno del Apóstol” para Banda. Ejerció de crítico musical en los diarios La Noche y El Correo Gallego. Un año más tarde, mediante concurso de méritos le ofrecieron la dirección de la Banda de Jerez de la frontera, propuesta que aceptó principalmente a las mejores condiciones que le ofrecían en Jerez.
En enero de 1955 Moisés Davia tomó posesión como Director de la Banda Municipal de Jerez de la Frontera (Cádiz), donde en tan solo unos meses formó un coro presentándolo en la Iglesia de San Miguel con el Miserere de Eslava. Posteriormente y debido a la gran afluencia de público, se repuso el mismo concierto en el Teatro Villamarta de Jerez.
Más tarde y debido al éxito que estaba teniendo la Banda, el maestro Davia fundó la Orquesta Sinfónica de Jerez de la Frontera, la cual en su presentación en el Teatro Villamarta causó una gran expectación al comprobar el público que todos los músicos eran del mismo Jerez. El éxito de la Orquesta Sinfónica fue rotundo, y en poco tiempo fundó también la Escuela de Municipal de Música de Jerez de la Frontera, que años más tarde se convertiría en Conservatorio, consiguiendo subvenciones para la orquesta y el coro.
Por su labor musical Moisés Davia Soriano fue nombrado Académico de Número de la Academia Jerezana de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras. Poco más tarde también fue nombrado Caballero de la Orden del Tío Pepe de Oro, medalla que le fue impuesta el 9 de junio de 1959. También en esta etapa ejerció de crítico musical en los diarios Ayer y La voz del Sur de Jerez.
Durante su estancia como Director en Jerez, el maestro Davia compuso numerosas obras como el “Himno a la Vendimia de Jerez”, “Himno de la Orquesta y Coro de Jerez”, “Uvas de Jerez”, “Caballero Andaluz”, la marcha de Semana Santa “Coronación de Espinas” o “Las Dulces Horas” entre otras. Todas estas obras fueron estrenadas e interpretadas por la Orquesta Sinfónica y el Orfeón de Jerez.
Tras siete años de intensa actividad en Jerez de la Frontera, en 1962 Moisés Davia abandonaba Jerez tras ganar la plaza de director de la Banda Municipal de Alicante, siendo su despedida un auténtico acontecimiento que llenó de amigos y conocidos el andén de la Estación Jerezana de Ferrocarriles.
En enero de 1962 Moisés Davia llegó a Alicante para ocupar la plaza de director de la Banda Municipal. Con la experiencia adquirida en Jerez, pidió la colaboración de los músicos de cuerda de Alicante y provincia y en poco tiempo presentó a las autoridades una Orquesta Filarmónica en los Salones del Ayuntamiento de Alicante.
Pese a la buena acogida de la orquesta por parte del público, no se llegó a apoyar del todo a la Orquesta y sólo se mantuvo durante cuatro años con la escasa ayuda municipal y sobre todo por el amor al arte de sus componentes.
Durante esta etapa también dirigió y condujo a su máximo apogeo a la Coral Crevillentina (Crevillente, Alicante). Con esta coral realizó giras de conciertos por toda España e incluso algunos por el extranjero, obteniendo numerosos premios en certámenes de los que destaca el primer premio en el II Certamen Nacional de Agrupaciones de Corales celebrado en Toledo en 1976.
Además el maestro Moisés Davia obtuvo el Premio Especial José de Sanmillán a la mejor dirección de masas de corales de España. Con la Coral Crevillentina organizó durante muchos años representaciones de ópera en Elda (Alicante), en las que participaron figuras tan relevantes como Plácido Domingo, Monserrat Caballé o Pedro Lavirgen.
En 1969 grabó el primer LP de la Banda Municipal de Alicante con la Coral Crevillentina, titulado Alicante en Fiestas, que años más tarde en 1997 fue reeditado en CD. Este album, junto al volumen II del mismo grabado en 1974, sigue siendo un referente de la música alicantina. Durante la década de los 70 también grabó varios discos más fruto de la colaboración entre la Banda de Alicante y la Coral Crevillentina.
Colaboró como crítico musical en el diario Información de Alicante y escribió artículos para diversas revistas como Hogueras de San Juan y Pueblos Alicantinos, así como para la revista Música y Pueblo, de la Federación Valenciana de Sociedades Musicales.
Fue también asesor musical de la Diputación de Alicante para los concursos de bandas provinciales y regionales. Como miembro de honor del Instituto de Estudios Alicantinos Juan Gil Albert desarrolló una importante labor en la difusión social de la música, convivencia de jóvenes músicos y concursos de composición.
Durante su estancia en Alicante compuso numerosas obras para las Hogueras como “Boda Alicantina”, “Hoguera de Calvo Sotelo”, el arreglo de la canción popular “Serra de Mariola”, y obras como “Palmera de Verde Palma”, “Crepúsculo”, la plegaria “Santa Faz” o el villancico “El Niño Pobre”, todas estas últimas estrenadas e interpretadas durante muchos años por la Banda Municipal de Alicante y la Coral Crevillentina. También destacan los himnos compuestos por Moisés Davia, como el “Himno a Denia”, “Himno de la Orden de la Dama de Elche” o el “Himno a Santa Pola”.
En 1979 quedó vacante la plaza de Director de la Banda Municipal de Madrid. Aunque Moisés Davia llevaba ya 18 años afincado en Alicante y gozaba de gran estabilidad y aceptación por parte del público, alentado por el gran reto que podría suponer para su carrera profesional decidió presentarse a la convocatoria para esta vacante en Madrid.
Cuando el jurado de la convocatoria para la plaza de director de la banda vio el historial como director de Moisés Davia, fue nombrado por unanimidad Director de la Banda Municipal de Madrid.
En 1979 fue presentado como nuevo director en un concierto en el Centro Cultural de la Villa, al cual acudieron numerosos amigos y aficionados, así como vecinos de Casas Ibáñez y otros lugares donde el maestro Davia ejerció de director.
Durante su etapa como director, Moisés Davia dignificó a la banda y propuso a las autoridades que fuera reconocida como Banda Sinfónica Municipal, hecho que fue oficializado en marzo de 1984 coincidiendo con el 75 aniversario de la Banda. También ejerció de articulista en el diario ABC y fue corresponsal y admirado colaborador de la revista Ritmo.
Hizo colaboraciones en el Boletín del Colegio Oficial de Directores de Bandas Civiles, del cual llegó a ser presidente en 1984. En este periodo compuso la obra “Diálogo de Saxofones” así como otras obras para cámara y orquesta.
Con motivo del 75 Aniversario de la fundación de la Banda creada por el maestro Villa, en 1984 se celebraron dos conciertos extraordinarios para celebrar el aniversario, uno en el Teatro Real al que asistieron numerosas personalidades, y posteriormente otro en el Templete del Retiro abierto a todo el público y admiradores de la Banda.
Ese mismo año en otoño se realizó un tercer concierto conmemorativo en el que el Maestro Davia dirigió a la Banda interpretando algunas de las mismas obtas que el Maestro Villa había programado en el concierto inaugural en 1909.
La etapa de Madrid supuso para Moisés Davia la culminación de su carrera como Director durante esos seis años de intenso trabajo y actividad musical. En 1985 decidió retirarse de la profesión activa, jubilándose con 63 años tras haber dedicado casi 40 como Director. Como cierre de su trayectoria se celebró en el Teatro Español un concierto de despedida, para el cual compuso el maestro Davia la obra para coro y orquesta “Canto a Madrid”.
Tras la jubilación, en 1985 Moisés Davia regresó a Alicante donde se había asentado parte de su familia 23 años atrás.
Durante estos años siguió realizando algunas composiciones y actuando como director invitado en varias ocasiones. En 1986 estrenó el pasodoble “Maribel Atiénzar” con la Banda Sinfónica Municipal de Albacete. En 1989 compuso la marcha para la Semana Santa de Jerez “Paz y Aflicción”, estrenada en Jerez ese mismo año, 31 años después del estreno de “Coronación de Espinas”.
En 1993 dirigió a la Banda Sinfónica Municipal de Alicante en la presentación del “Himno a la Hoguera de Maissonave”, acto en el que también interpretó junto a la Banda algunas de sus obras más conocidas en Alicante.
En 1994, con motivo del 85 aniversario de la Banda Municipal de Madrid, fue invitado por el Ayuntamiento para el concierto extraordinario que dirigía Enrique García Asensio en el Centro Cultural el día 14 de noviembre.
Moisés Davia viajó a Madrid con el objetivo de asistir a este concierto, pero fallecía repentinamente la noche anterior, el 13 de noviembre de 1994. Durante el concierto de aniversario se guardó un minuto de silencio en memoria del Maestro Davia.
Tras su fallecimiento, D. Moisés ha recibido numerosos homenajes en los distintos sitios donde ejerció su labor de director. En 1997, la Banda Sinfónica Municipal celebró un concierto homenaje en el Parque del Retiro de Madrid, interpretando la 1º parte del concierto obras de M.Davia.
Posteriormente se le han dedicado calles en Alicante y Chinchilla, así como plazas en Casas Ibáñez y la más reciente en Santa Pola. También se le ha rendido homenaje durante los conciertos conmemorativos de los 100 años de la Banda Sinfónica Municipal de Madrid (2009) y de la Banda Sinfónica Municipal de Alicante (2013).
En 2019, con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento, también se han celebrado conciertos homenaje en Chinchilla y Albacete.
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